Son síntomas globales, que pueden ser provocados por muchas causas y motivos, obligando siempre a descartar causas neoplásicas (cáncer) inflamatorias o infecciosas.
Hoy día, asistimos no sólo al diagnóstico por descarte, ( al cual se llegaba al no encontrar otra explicación plausible) sino que hoy día se exige un diagnostico positivo , en el cual cada día conocemos más causas etiológicas a los que dirigir nuestros esfuerzos para mejorar satisfactoriamente la calidad de vida de nuestros pacientes.
Cada paciente es distinto y complejo con múltiples factores asociados a la hora de percibir y realizar su propio proceso digestivo .
Desde el conocimiento personalizado del mayor número de factores involucrados más eficaz y menos agresivo será el tratamiento.
Estos factores múltiples incluyen distintos grados de interacción; entre distintas patologías que incluyen multiples intolerancias alimentarias, infección o colonización del Helicobacter pylori, alteraciones de la flora intestinal o de la propia motilidad hipersensibilidad visceral, enfermedad por reflujo gastroesofágico y un largo etcétera que implica un alto conocimiento y un esfuerzo contaste en mantenerse al día de la que sin duda es una de las patologías más prevalentes de nuestra sociedad .