Las hemorroides son una parte normal de nuestro cuerpo, unas almohadillas formadas por vasos sanguíneos que rodean al canal anal.
Se califican en grados y pueden ser muy molestas, por lo que se aconseja un tratamiento escalonado.
Puede deberse a una debilidad del tejido conjuntivo en las hemorroides, al aumento de la presión del esfínter anal interno o a trastornos inflamatorios locales. Se califican en grados, desde grado I (que no salen del ano) hasta grado IV (que están permanentemente fuera del ano y no se pueden reintroducir).
Las hemorroides pueden producir sangrado al final de la deposición o al limpiarse, prurito(picor) anal, y molestias provocadas por la salida hacia el exterior (prolapso) y la sensación de“bulto” anal. En algunos casos el dolor puede ser intenso debido a la trombosis y contractura del esfínter anal.
No todos los pacientes que presentan esos síntomas tienen hemorroides, por lo que es fundamental descartar otros problemas potencialmente importantes, mediante la historia clínica, exploración y endoscopia.
El tratamiento de las hemorroides dependen de los síntomas y del grado de las mismas, es un tratamiento escalonado, inicialmente con medidas higiene- dieteticas y pomadas locales, cuando los síntomas son resistentes a tratamiento, o cuando están en mayor grado es cuando estaría indicado el tratamiento endoscópico de las mismas, con distintas técnicas , encaminadas a la erradicación completa de las mismas, generalmente en varias sesiones separadas en el tiempo, se realizan fundamentalmente dos tipos;
– Ligadura de hemorroides mediante la colocación de bandas elásticas
– inyección de sustancias esclerosantesdentro de la propia hemorroides,
– o la combinación de ambas técnicas para un mejor resultado.
Es una técnica sencilla en manos expertas y definitiva en la mayoría de los casos , con menores complicaciones y resultados comparables a la cirugía , dejando esta última reservada a casos más extremos.